Este jueves, Adriana Salgueiro estuvo como invitada en Desayuno Americano (América). En diálogo con Pamela David, conductora del ciclo, la actriz se sinceró sobre su complicado presente económico y contó que tuvo que recortar sus gastos para poder llegar a fin de mes.
“Tuve que cambiar un montón de cosas, obviamente, y replantear el tema de mi propia economía con respecto al cable, el teléfono, todos los servicios que uno tiene”, comenzó diciendo la artista.
Acto seguido, indicó en qué áreas no ajustó el bolsillo: “La obra social no se toca”. “Acomodar mi economía lo voy a tener que hacer como lo hacen todos los argentinos”, agregó.
Sobre los recortes que hizo, detalló: “El cable, la empresa de seguros, bajar los seguros del auto, y me parece con cosas chiquitas”. Por último, en cuanto a cómo hace para subsistir, Salgueiro cerró: “Trabajando muchísimo para poder salir adelante. En el teatro se nota la merma del público porque no es un artículo de primera necesidad”.
Adriana Salgueiro habló del robo que hubo en su edificio: “Fue una cosa de locos, se llevaron los picaportes”
Adriana Salgueiro habló del robo a su edificio en noviembre del año pasado: un hombre se llevó los bronces de la puerta de calle a plena luz del día. En diálogo con TN Central (TN), la artista dio detalles de lo ocurrido y expresó: “Fue una cosa de locos”.
Este jueves, la exmodelo publicó un video de las cámaras de seguridad del edificio donde vive. Allí dejó ver el preciso momento en que un hombre robaba los bronces de la puerta. Al aire de TN, Mario Massaccesi señaló: “Esto no es un hecho aislado. Está pasando en todos los edificios y muchos de ellos históricos de la zona de Barrio Norte, Recoleta, Palermo. Se roban los picaportes, los porteros eléctricos, los de las cartas”.
En diálogo con el conductor, Salgueiro precisó: “Fue una cosa de locos, fue a eso de las cinco de la tarde. Este es un barrio bastante concurrido y nosotros en este edificio tenemos dos puertas. Una vecina lo vio y se asustó un poco, pero no lo quiso echar porque estaba comiéndose unas papas fritas. Pero cuando ella entró, vino y en un segundo puso como una especie de madera y se metió el bronce debajo de la remera y se fue”.