En los últimos días en el Concejo sucedieron dos hechos relevantes:
El primero es relacionado al manejo de la planta recicladora, administrada de forma conjunta entre el Municipio de Fontana y el de Puerto Tirol.
Fernando Cuadra presenta un proyecto al Concejo para otorgar el manejo de ducha planta a una cooperativa leal a él, mientras que la Concejal Leiva también presenta un proyecto pero nombrando a una cooperativa amiga de ella.
Cuando se trata en el Concejo los resultados se dan de la siguiente manera: el proyecto del intendente solo tiene el voto favorable de Abatte, tres negativos del bloque SUMAR de Leiva, y la abstención de los 5 Concejales peronistas. Pero lo llamativo es que cuando se vota el proyecto de la Concejal Leiva este tiene 4 votos a favor: los tres de SUMAR más Abatte, y los peronistas siguen en su postura de abstenerse.
Luego a esto se produce lo más lamentable: los 3 Concejales del bloque SUMAR logran que 3 de sus contratados de gabinete pasen a contratos de servicio, con solo meses en sus funciones. Ahora estos ediles podrán incorporar tres trabajadores a su gabinete por haberlos liberado mediante la nueva contratación.
¿Estamos frente a una descarada compra de voluntades? ¿Se estará armando una estrategia para obtener la mayoría necesaria en el Concejo y así quebrar el frente peronista en la ciudad?
No deja de asombrar con la impunidad que realizan estas maniobras, habiendo echado contratados de servicio excusandose en la masa salarial de los municipales hoy se realiza estos contratos de servicio. Que opinaran los contratados de obra del Municipio que están hace meses y años cumpliendo funciones y no se han comportado con ellos de igual manera.
Además, a través de diferentes fuentes, se espera para diciembre una nueva camada de despidos en el municipio, con una cifra que rondaria los 40 trabajadores.
El clandestino 👀