Luego de una larga espera, Sabrina Carpenter estrenó hoy su nuevo disco, Short n’ Sweet. Se trata de un álbum de 12 canciones que contiene dos de sus mejores hits: “Espresso” y “Please, Please, Please”.
En el marco del lanzamiento del álbum, la telonera de Taylor Swift también estrenó un impactante y cinematográfico video para “Taste”. Para este clip contó con la actuación de Jenna Ortega, quien se ha convertido en una figura clave del terror actual.
Además, el video contiene referencias a films de terror y terror comedia como La muerte le sienta bien, Psicosis, Kill Bill y La masacre de Texas, entre otras. A menos de cuatro horas de su estreno, el video superó las 2 millones y medio de reproducciones.
“Esta canción es muy especial para mí y estoy increíblemente agradecida a todos los que me ayudaron a darle vida a uno de mis vídeos más ambiciosos”, escribió en redes la artista para presentar el video en el que ella y Ortega interpretan a dos asesinas que pelean por el mismo hombre.
Además, aprovechó para piropear a la actriz de Merlina y Scream: “Tenía una persona en mente para esto y esa era la única e inigualable Jenna Ortega. Verla en pantalla es un verdadero sueño hecho realidad y estoy tan inspirada, impresionada y sorprendida por ella”.
Carpenter se está convirtiendo en una de las estrellas pop más sobresalientes de la actualidad y una de sus cualidades es la apuesta por una poderosa propuesta visual, con toques retro y también paródicos.
El nuevo disco de Sabrina Carpenter
En la noche del jueves, la cantante estadounidense estuvo presente en The Tonight Show with Jimmy Fallon y allí interpretó sus canciones en vivo para promocionar el nuevo lanzamiento.
“Me siento extremadamente afortunada de que cada vez que escribo un nuevo disco aprendo un poco más sobre mí misma, y puedo crear desde ese lugar. El making of de Short n’ Sweet fue una de las experiencias más especiales, honestas, arriba y abajo, estúpidas y divertidas de mi vida”, expresó en redes sobre este disco que despliega influencias de Swift, de la música country, el pop y se aleja de la tendencia de la música urbana.
“Pensé que si algo era lo suficientemente divertido como para hacerme reír entonces tal vez pertenecía a una canción. ¡Feliz o triste!”, afirmó sobre el proceso creativo de este disco que no cuenta con colaboraciones, una tendencia que parece casi una obligación en la música actual.