La inclusión es un tema que comenzó a tratarse de una manera más comprometida desde hace unos años y es importante darle visibilidad en todos los ámbitos de la sociedad, ya sea en la escuela o en el trabajo.
“Con el nacimiento de nuestra última hija, Martu, hace 28 años, entramos en una nueva cancha. Con su síndrome de Down, nos trajo un gran desafío y nos enseñó que la vida era para otro lado. Junto con otras familias, armamos hace 26 años, una asociación civil de padres. Desde allí, hicimos una gran red de contención, aprendizaje y nueva forma de vida”, señaló Fabiana Rosasco Odriozola, presidente de Down is Up.
Además, indicó: “Estamos agradecidos por todo lo que recibimos en todos estos años en los que trabajamos para formar una cadena de oportunidades y grupos de pertenencia, según las etapas que están viviendo. Familias, colegios y escuelas necesitamos aprender para que la enseñanza llegue y aleje la frustración mutua (maestro-alumno) por no saber cómo llegar al aprendizaje, avanzar y entusiasmar”.
Rosasco Odriozola, señaló, además: “Tenemos una edad para darnos cuenta de que nuestros hijos no quieren vivir con nosotros y estamos tratando de captar a los que no tuvieron la suerte de que la sociedad los reciba. Antes, no se veían porque se usaban otros métodos disuasivos para que no se vieran en la sociedad para que la diversidad no se naturalizara”.
Jornadas Inclusivas 2024
Down is Up, la asociación civil dedicada a promover la dignidad, inclusión y autonomía de las personas con síndrome de Down, llevará a cabo las Jornadas Inclusivas 2024 el martes 13 y el miércoles 14 de agosto en el Centro de Convenciones Dr. Arturo Frondizi, en Vicente López.
Durante las jornadas, se abordarán temas relacionados con la educación, la inclusión escolar y laboral y la vida autónoma. Los profesionales convocados compartirán herramientas prácticas para implementar programas de inclusión efectivos tanto en ámbitos educativos como laborales.
La presidenta de Down is Up comentó: “Presentaremos un proyecto de vida independiente que se llama Casa Up, una casa cedida para poder adaptarla donde los chicos van a empezar los entrenamientos de vida autónoma. El apoyo siempre tiene que existir en la discapacidad y, a medida que avanzás, el apoyo ya no se llama papá o mamá”.
“Entonces vas acompañando las diferentes etapas con diferentes personajes. Los más grandes empiezan a entrenar la teoría y la práctica, vivir en comunidad, vivir entre ellos y una vida, como nos gusta decir, elegida como elegimos las nuestras. Es relindo pensarlo así. Apuntamos a poder lograr esta gran idea que surgió y estamos viendo el horizonte donde van a poder hacer esos entrenamientos que ellos elijan. Tienen que trabajar y ser autónomos, si no, no pueden acceder a una vida independiente, necesitamos conseguir que se animen a equivocarse”, culminó.
Qué más habrá en las Jornadas
Rosasco Odriozola contó que, en esta oportunidad expondrá el licenciado Emilio Ruiz, experto en Psicología Educativa y Clínica, y la licenciada Carme Llorens Pujó, reconocida por su labor en Pedagogía Terapéutica en la Fundación Aura de Barcelona y su experiencia en la temática de empleo con apoyo.
“Entre charla y charla, tenemos sorpresitas de gente que superó discapacidades, que trabaja y lo que queremos con las jornadas es apuntalar nuevamente la educación. Tenemos 500 lugares para que se sienten terapeutas, psicopedagogos, fonoaudiólogos, es decir, todo lo que esté vinculado a enseñar a generar vínculos para que la persona pueda desplegarse”, dijo.
Asimismo, explicó que Emilio Ruiz cerrará su exposición hablando de “Inteligencia emocional”, mientras que Llorens Pujó hablará sobre empleo con apoyo, salida laboral y vivienda autónoma. “Queremos sentar a la mayor cantidad de empresas que podamos para que se den cuenta que nuestros hijos grandes que piden autonomía no van a poder ser autónomos si no trabajan”, expresó.