A 26 días de la desaparición de Loan Danilo Peña en Corrientes, aún no hay pistas firmes que permitan dar con el paradero del nene. Sin embargo, a medida que pasan los días, siguen surgiendo nuevos testimonios que despiertan sospechas.
En este caso, Camila Núñez, la esposa del primo de Loan, habló con TN y aseguró que, durante los primeros días de la búsqueda, intentaron sobornarla a cambio de inculpar a alguien. “Me ofrecieron una vida nueva en Brasil”, afirmó en diálogo con la periodista Paula Bernini.
En la entrevista, la joven de 24 años siguió sosteniendo que si Loan hubiese vuelto del naranjal, ella lo veía y que la teoría del accidente entonces es “imposible”. “A él le costaba pasar por el alambre, se iba a quedar atrapado o romper la ropa. Además, él no conocía muy bien el lugar. Él tendría que haber vuelto sobre sus huellas”.
En este contexto, Camila se refirió a Macarena, la hija de Laudelina Peña, quien compareció ante la jueza federal Cristina Pozzer Penzo, en Goya. Allí, detalló cómo su madre fue presuntamente sobornada y amenazada para respaldar la versión del accidente. “Macarena me contó que está muy asustada. Teme por ella, por la madre, por los hermanos”, expresó la prima de Loan.
Asimismo, apuntó contra el abogado de Laudelina, José Codazzi, y dijo que para ella “él se embarró solo”. “¿Cómo va a decir que fue un accidente? ¿No pensó en los demás que estuvimos ese día? Para mí hay algo más en juego, que a él le habrán ofrecido otras cosas”, deslizó.
En ese momento, al ser consultada sobre si ella también fue amenazada, Camila asintió. “Me ofrecieron algo. Querían que yo inculpara a cualquiera que estuviera detenido”, reveló. Y añadió: “No lo conté porque no lo tenía muy presente en mí hasta anteayer cuando estaba dialogando con un periodista. Ahí me empezaron a venir esos recuerdos a la mente”.
Según el testimonio de la prima del chico desaparecido, un grupo de cuatro hombres llegó a la casa de Catalina Peña, la abuela de Loan, en busca de ella para hablar. “A los 11 días de la búsqueda, ellos llegaron normal y solicitaron hablar conmigo. Me empezaron a decir que si esto llegaba al fuero federal, me iban a sacar a la nena, me iban a enviar presa a otro lugar. Son típicas de un susto que quieren provocarte”, detalló.
“No recuerdo los nombres, sí sé cómo estaban vestidos. Ellos me empezaron a hacer tener miedo. Ellos grababan audios, pero cuando hablaban ellos, lo pausaban. Siempre me negué. Les decía, voy a pensarlo”, continuó Camila, quien dijo que todavía no dio estos detalles ante la Justicia Federal.
De acuerdo a su relato, la idea era que ella apuntara como culpable a cualquiera de las personas que haya estado presente en el almuerzo a cambio de “una nueva vida”. “Para mí eran policías, pero a quién protegían no sé. No confío ni en mi propia sombra, pero yo sigo sosteniendo la verdad”, concluyó.