A poco más de dos semanas de la primera vuelta de las elecciones legislativas anticipadas, un fuerte terremoto golpeó a la política francesa.
Éric Ciotti, líder del partido Los Republicanos, los neogaullistas conservadores, propuso conformar una inédita alianza con la derecha radical Agrupación Nacional (RN), ganadora de los comicios europeos del domingo y liderada por Marine Le Pen y la joven promesa Jordan Bardella.
De esa manera, Ciotti dio una estocada al llamado ‘cordón sanitario’ que mantenía fuera de cualquier alianza de gobierno a la ultraderecha, que obtuvo alrededor del 30% de los votos en las legislativas europeas, el doble de los que alcanzó el partido del presidente Emmanuel Macron.
Tras su derrota, el mandatario convocó a elecciones anticipadas, en dos turnos, para el 30 de junio y el 7 de julio. Las últimas encuestas muestran que Agrupación Nacional podría obtener la mayoría absoluta en la Asamblea Nacional (cámara baja del legislativo francés) si contase con el apoyo de los conservadores, lo que impondrían a Macron un primer ministro y un gobierno ultraderechistas.
Cuál es el panorama político que se abre ahora en Francia
De concretarse, esta alianza cambiaría el panorama político francés.
Hasta ahora, ningún partido había siquiera analizado la posibilidad de aliarse a la Agrupación Nacional (RN), el partido heredero del viejo Frente Nacional fundado por el controvertido Jean-Marie Le Pen en 1972. De hecho, en el último balotaje de 2022, Macron venció a Marine Le Pen al capitalizar en las urnas el rechazo de un amplio espacio de la sociedad a la derecha radical.
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Pero eso podría cambiar en las próximas semanas. La derecha radical de Le Pen y Bardella venció en los comicios europeos del domingo y dejó muy malherido a Macron, que se vio obligado a llamar a elecciones anticipadas.
Este lunes, en una entrevista televisada en TF1, el canal más visto de Francia, Ciotti contribuyó a tensar el ambiente político del país. “Necesitamos una alianza con la Agrupación Nacional”, afirmó.
Ciotti dijo que su partido es “demasiado débil” por sí solo frente a los demás grandes bloques políticos para defender “los valores de la derecha”.
Crisis interno entre los conservadores franceses
La frase de Ciotti creó un terremoto sin precedentes en Los Republicanos, partido heredero de los expresidentes Charles de Gaulle y Jacques Chicac y refundado por Nicolas Sarkozy en 2015.
Los Republicanos, con distintas denominaciones, gobernó Francia durante 39 años, desde la proclamación de la V República en 1958, más que ningún otro partido. Desde la aparición de la ultraderecha de Jean-Marie Le Pen, había presumido de ser un pilar de estabilidad contra los extremos.
Tras sus declaraciones, Ciotti se reunió con la comisión ejecutiva de su partido, con la que pretende validar el principio de acuerdo al que llegó con Marine Le Pen y su delfín y aspirante a primer ministro, Jordan Bardella: mantener sus 61 diputados de la Asamblea Nacional, evitando que la derecha radical presente candidatos alternativos en esos distritos.
Ciotti tildó de “pasado de moda y poco adaptado” el ‘cordón sanitario’ contra la ultraderecha, cuya cúspide fue en las presidenciales del 2002, cuando electores progresistas votaron a Chirac para batir a Le Pen padre. Ese famoso ‘dique republicano’ para frenar a partidos considerados no completamente democráticos ya empezó a tambalearse en 2017, con la primera elección de Macron, y se confirmó en 2022, cuando el margen entre Macron y Marine Le Pen se estrechó aún más.
Pero la propuesta de Ciotti recibió duras críticas y pedidos de renuncia. Gérard Larcher, presidente del Senado, la segunda figura del Estado tras el Presidente de la República, fue terminante. En un mensaje en X, afirmó que Ciotti “no puede presidir más nuestro movimiento y debe abandonar su mandato de presidente de Los Republicanos”.
Michel Barnier, antiguo ministro, comisario europeo y negociador por la UE del acuerdo para el Brexit, aseguró que Ciotti “ya no tiene ninguna legitimidad para hablar en nombre de la familia política” de los conservadores.
Hasta cuándo hay tiempo de presentar alianzas
El plazo de formación de candidaturas vence el próximo día 16 y los movimientos electorales en los macronistas y sus socios aún no son perceptibles.
En tanto, la izquierda asegura haber avanzado para crear una coalición electoral que agrupe a La Francia Insumisa (LFI), los socialistas, los verdes y los comunistas, con visiones muy divergentes en asuntos como la integración europea.
Desde la ultraderecha, parece que ha fracasado un acercamiento de Marine Le Pen con Marion Maréchal, su propia sobrina y líder del pequeño partido antiislamista (Reconquista).
