Este lunes Roberto “la Hiena Humana” Carmona volverá a estar ante un tribunal en la ciudad de Córdoba. Esta vez, encerrado en una cabina de vidrio, será juzgado por asesinar en plena fuga a un taxista el 13 de diciembre de 2022 y podría recibir otra perpetua.
El banquillo de los acusados que ocupará Carmona estará en el interior de un cubículo blindado para impedir cualquier movimiento del asesino múltiple. Desde allí, tendrá que responder por los delitos de evasión y robo calificado por el uso de arma, y homicidio criminis causae.
Los familiares del taxista asesinado, Javier Bocalón, estarán representados por el abogado Carlos Nayi y ya fueron advertidos sobre las fuertes medidas de seguridad que se tomaron para resguardar tanto la integridad de los presentes como así también el debido proceso judicial. En tanto, la acusación estará a cargo del fiscal Hugo Antolín Almirón y la defensa del letrado Aníbal Zapata.
El crimen del taxista Javier Bocalón
Javier Bocalón, de 45 años, fue la última víctima de la “Hiena Humana”. El martes 13 de diciembre de 2022, Carmona aprovechó la semifinal que Argentina jugó con Croacia en el Mundial de Qatar y se escapó durante una salida transitoria de una casa de Las Violetas, donde iba a ver a su pareja.
Tras evadir a cinco guardias y un enfermero que debían custodiarlo, el acusado secuestró al taxista para fugarse y apuñaló a Bocalón mientras manejaba. La víctima murió casi en el acto y chocó contra un poste en una esquina de la capital cordobesa.
Él disfruta haciendo sufrir a la gente, disfruta con el dolor ajeno.
Tras cometer el crimen, el asesino le robó el auto a una pareja, chocó a otro vehículo, siguió la fuga a pie, trató de robarle el vehículo a otra mujer y finalmente, después de dos horas, la policía logró recapturarlo en plena vía pública.
El prontuario de la “Hiena Humana”
Cuando asesinó a la adolescente de 16 años Gabriela Ceppi en 1986, tal vez el crimen más aberrante que cometió, Carmona ya tenía una condena a 10 años por robo. Sin embargo, a sus 23 años, la Justicia de ese momento lo benefició con la libertad anticipada.
Así, el asesino serial secuestró, violó y fusiló de un disparo en la cabeza a la chica y después descartó su cuerpo en un campo de sorgo en la ruta 9, donde lo encontraron un mes más tarde.
En 1988 fue condenado a reclusión perpetua con la pena accesoria de reclusión por tiempo indeterminado. Sin embargo, ni la cárcel aplacó la sed de sangre de la “Hiena”, que dentro del penal de Córdoba le tiró caramelo caliente en la cara a un preso porque impidió que violara a su esposa y apuñaló a otro. Como no lo mató, le tiró agua hirviendo mientras dormía.
En 1994 asesinó a Héctor Vicente Bolea, un preso con el que compartía condena para disputarle el control del pabellón. Entonces lo trasladaron a una cárcel de Chaco y en julio de 1997 mató a Demetrio Pérez Araujo y lo sentenciaron de nuevo por homicidio.
Con tres condenas, dos a perpetua y la tercera a 16 años, en 2014 la justicia chaqueña lo autorizó a tener salidas transitorias y empezó a viajar a Córdoba cada cuatro meses para ver a su pareja.
En una entrevista con TN Héctor Ceppi, el padre de la adolescente que se convirtió en la primera víctima del asesino, consideró que Carmona “es un hombre muy inteligente, con una enfermedad espantosa de ser psicópata”. “Él disfruta haciendo sufrir a la gente, disfruta con el dolor ajeno”, subrayó.