El joven, debido a la explosión, se quemó una gran parte de su cuerpo y arribó al HECA asistido por el personal de la Policía Motorizada y una ambulancia perteneciente al Sistema Integrado de Emergencias Sanitarias (SIES), donde se constató que tiene el 80% de su cuerpo con quemaduras con compromiso de las vías aéreas.
La muerte del otro joven que intentó robar cables en Rosario
Ezequiel Francisco Curaba permanecía en estado crítico y con custodia policial. Terminó con el 90% del cuerpo quemado y falleció en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (HECA) después de que intentara robar cables de alta tensión en Rosario.
Se había electrocutado al intentar robar unos cables dentro de una zanja que la Empresa Provincial de la Energía (EPE), había abierto en la vía pública.
Su hermano, quién también participó del intento de robo, no sufrió heridas pero quedó detenido. En el caso de Ezequiel Francisco Curaba, los servicios de emergencias lo trasladaron al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (HECA), al cual permaneció en estado crítico y con custodia policial.
Varios vecinos de la avenida Juan Domingo Perón al 6100, en Rosario, grabaron los momentos posteriores a que Álvarez recibiera la descarga, donde se lo podía ver al joven en estado de shock, mientras subía a una ambulancia y era increpado por la gente que se reunía a su alrededor.
La subdirectora del HECA, Laura Taljame, informó en su momento que el joven se encontraba en estado crítico y en terapia intensiva, y que su cuadro era complicado, debido a que en estos casos «se junta la descarga eléctrica y el hecho de que los pacientes se prenden fuego y se generan quemaduras de grandes extensiones».