La fiscal especial de Derechos Humanos: Silvia Slusar, ordenó la noche del viernes la libertad de Francisco Torres, Javier Ramón Miño, Mauro Ramírez y José Alberto Gauto, 4 de los 5 policías detenidos por la muerte de Josué Lago, el joven qom asesinado durante un operativo policial el mediodía del viernes 11 de junio en el barrio Los Silos, de General San Martín.
Así, sólo permanece detenido Guillermo Viñuela, sindicado por los testigos como el autor del disparo.
Aparentemente ya obran en poder de la funcionaria los informes de las pericias instruidas para intentar detectar vestigios de pólvora en los efectivos policiales y la autopsia.
El último jueves el procurador Jorge Canteros, habló de las dificultades para hallar el proyectil a pesar de que sólo presentaba orificio de entrada, por lo que había quedado alojado en el cuerpo de Lago.
Paralelamente, el jefe de la Policía: Ariel Acuña, había opinado que el tipo de herida no se condecía con la que podría generar una pistola calibre 9 milímetros. Y dando por improbable la posibilidad de que un policía utilizara un arma distinta, consideró indebida las detenciones.
