La semana pasada la planta extractora de tanino Indunor, radicada en La Escondida encendió todas las alarmas de la comunidad cuando sus chimeneas despidieron descomunales columnas de humo negro, que se sumaron al característico olor y lluvia ácida de todos los días.
Tras las denuncias públicas, la secretaria de Desarrollo Territorial y Ambiente de la Provincia: Marta Soneira, y el intendente Francisco Winnik, encabezaron una inspección ocular en la planta, acompañados por el responsable de la empresa Sergio Scaramutti.
Técnicos de la Secretaría, especialistas en residuos peligrosos e impacto ambiental relevaron la línea de producción y elaborarán un informe.
“Las autoridades provinciales pudieron ver que en la planta no estamos generando gases tóxicos ni emitiendo a la atmósfera”, manifestó el gerente de Operaciones de Indunor: Sergio Escalamuti, y aseguró que la compañía tiene un plan de monitoreo del impacto ambiental.
Pero el intendente Winnik tiene otra mirada. Según reporta el sitio oficial del Gobierno del Chaco, dijo que “a veces se les escapa el tanino y eso da un color rojizo a las calles o techos, aparejado con una pequeña llovizna que tiñe todo de rojo y molesta un poco a las y los vecinos”.
