
“Ex electricista que se hizo famosa por someterse cirugías plásticas y que sueña con convertirse en actriz”, escribe además en su biografía. Fox había comenzado con las operaciones para parecerse al personaje de ¿Quién engañó a Roger Rabbit? pero luego se enamoró de la princesa de Disney.

La sueca lleva gastados más de 700 mil dólares en las cirugías y otros tratamientos de belleza para lograr su parecido a los personajes. Entre las intervenciones ya se ha sacado algunas costillas, se ha operado la nariz numerosas veces, tiene implantes de senos, cola y labios, y además se redujo la cintura y el mentón.


Sin embargo, también ha tratado de imitar a otros personajes como la princesa Giselle, la reina Kida o incluso Barbie. Ya que actualmente en sus redes, donde suma casi medio millón de seguidores, continua mostrando su figura y su vida cotidiana pero con su cabellera rubia.
